domingo, 20 de octubre de 2013

¡IMPACTANTE  REALIDAD!

Por  M. M.   10º 2

Ella, una chica… ¿común y corriente? Su madre la cuidaba como a nadie, su padre era terco, pero hacia todo lo que podía para que ella estuviera bien… pero ella no se daba cuenta, no quería ver lo que ellos hacían por ella… 
Para ella lo más importante eran sus amigos…
Un día, posiblemente como cualquier otro, tuvo uno de esos momentos en los que te das cuenta de que no todo es como piensas, de que el hecho de que tú pienses en los demás, no hace que ellos piensen en ti… De que esas personas a las que no les prestas tanta atención, son las personas que más se interesan por ti…  De que si no te esfuerzas por ti, otros no lo harán… Se dio cuenta que si no caminaba con la vida, la vida caminaría sin ella, porque no importa lo que hagas, no puedes ser tan egoísta como para pensar que el mundo se detendrá por ti… 
Se dio cuenta de que les debía disculpas a varias personas, de que sus amigos, aunque fueran sus amigos, no la tenían en cuenta para todo y que no debía esperar demasiado de ellos, porque cuando esperas, corres el riesgo de decepcionarte…
Se dio cuenta de que sin importar lo que ella quisiera pensar,  la culpa de que estuviera estancada en una etapa de su vida era de ella y únicamente de ella…

 Ella decidió y hasta el día de hoy no se sabe si decidió bien o mal… porque hasta el día de hoy, no se han visto los resultados… Ella decidió que debía esforzarse y dedicarse, no únicamente a ella, pero tampoco únicamente a los demás, decidió que tenía que valorar lo que tenía y que debía disfrutar cada día como si fuera el último

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