Por Álvaro
Villa R. Coordinador IEGAMAR.
Se le ocurrió a un sabio de
estos últimos tiempos sacar la fórmula
mágica para tener en el futuro inmediato unos excelentes hijos, ciudadanos y
por consiguiente unos nuevos padres ejemplares.
Plantea
él:
“Dejad que vuestros hijos te sigan
faltando al respeto, que las órdenes las expresen ellos; apoyadlos cuando le
falten o amenacen a sus profesores; cuando te
ignoren y te griten, los aplaudes porque ello es lo normal; permitidles
que se vistan y corten su cabello como les venga en gana o como lo exigen sus
amistades. ¡Ah! No les digáis nada si entran a cualquier hora de la noche o
al amanecer, para qué amargarles el rato si ellos son los que mandan. No les
preguntéis cómo les fue en el colegio ni les reviséis los cuadernos, ellos
saben lo que hacen. No les censuréis las
amistades que seleccionan, ellos por lo regular eligen las mejores, por ello les va muy bien
en el colegio. No les reprochéis el vocabulario tan bonito que pronuncian, es
el ideal para compartir en familia. No saquéis a diario el ratico para
orientarlos, ellos ya saben lo que hacen. No les neguéis la libertad, dádselas
toda para que sean felices. Y por último y por hoy si te levantan la voz o la
mano no demoréis en agacharle la cabeza,
pues al fin de cuentas son ellos quienes mandan ya en la casa”.
Si creen amigos lectores que
esta es la fórmula mágica, pónganla en práctica y “no dejen para mañana lo que
puedan hacer hoy”.
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